martes, 22 de octubre de 2013

Cercanías
La grava negra destaca,
colchón de traviesas desnudas,
raíles que reposan bruñidos
de acero que rueda y rueda.
 
El sonido de una guitarra,
quebrado en lamento sordo
de hambre que grita en silencio,
pidiendo moneda a cambio
de un instante de dolor ajeno,
por esa mano que rasga
las cuerdas de las que penden
corazones en el pecho encogidos
que esconden, encerrados
en sus propias miserias,
sentimientos encontrados
que pugnan por evitar
un trago no demandado,
mirando, sin mucho afán,
traviesas, raíles y grava
fuera  por un cristal
que devuelve la mirada
que no queremos encontrar.

Chirría el freno,
sacude el cuerpo,
y salen y entran
almas con otro andar,
rompiendo el silencio mudo,
testigo de los pesares
que lastran las entretelas
de nuestro ir y venir…



Madrid, 21 de octubre de 2013 entre Getafe y Las Rozas

viernes, 11 de octubre de 2013

El tiempo de mi vida
El tiempo se desliza lento
entre mis dedos
como cuentas de un rosario
convertido en letanía
que recita las horas,
los minutos y segundos,
en un flujo continuo
que no puedo detener.

Escucho los latidos
de mi propio corazón
acompasados con el segundero
de mi reloj vital
que marcan el ritmo
del devenir cotidiano.

Trato de acoplar el pensamiento
a este paso sincopado
y consigo adormecer
los sentimientos en el cansino
discurrir de mi vida
en este tránsito que hoy
me ha sido concedido.



3 de octubre de 2013, cerca de Córcega
Tu retrato
Me sorprendo, oh mujer
que, a pesar de que mi vida
ya transcurre lánguida
hacia su desenlace,
siento la pasión alborotada
cuando tus labios se acercan
y me parecen, iluso,
olas que besan la playa
de los míos con suavidad,
o como temporal impetuoso
según la ensoñación momentánea.

Mientras te contemplo
me siento un ladrón
y me apropio de retazos
de tu sonrisa, de tu mirada
y ansío una palabra tuya
para incluir tu voz en el retrato
que forma, en mi imaginación,
un eco nostálgico de ti
desvaído por el paso inexorable
del tiempo que todo lo arrasa.



Octubre de 2013 entre Barcelona y Civitavecchia